El Origen del Broche ✍️

El Origen del Broche ✍️
  by Ana Hellen Rangel Ochoa

Mucho antes de convertirse en un accesorio de estilo, el broche tenía una función práctica: sujetar prendas. En las antiguas civilizaciones, como la griega, romana y celta, los broches —conocidos como fíbulas— eran esenciales para mantener en su lugar las túnicas y capas. Pero con el paso del tiempo, su papel evolucionó.

En la Edad Media y el Renacimiento, los broches comenzaron a destacar como símbolo de estatus. No solo sujetaban la ropa, también comunicaban poder, riqueza y pertenencia a cierta clase o familia. Reinas, emperatrices y figuras ilustres usaban broches adornados con piedras preciosas, esmaltes y metales finos. Cada uno tenía un mensaje, un significado, una intención.

Con la llegada de la era moderna, el broche siguió transformándose: se convirtió en un detalle de estilo, en un statement, en una pieza que puede hacer que un look pase de simple a extraordinario.

Hoy en día, aunque ya no necesitamos broches para cerrar una capa, seguimos llevándolos por todo lo que representan. Son objetos que cuentan historias, que transforman prendas y que nos permiten expresar quiénes somos.

En Broche de Oro, creemos que los broches nunca se fueron. Solo estaban esperando su momento para volver con más fuerza. Por eso, hemos creado una curaduría de piezas únicas, para que los incorpores en tu día a día con estilo, personalidad y propósito.

Porque un broche no es solo un accesorio: es una declaración.

  by Ana Hellen Rangel Ochoa

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